Estaba pensando que escribir en la reseña de este film para el otro blog en el que participo (Aqui la reseña y el film por si quieren verlo) cuando realmente se me ocurrió esta entrada que no puede ser catalogada como critica porque realmente no estoy comentando todo el film, sino una escena que me llamo la atencíon.
Jim Hardy, Interpretado por Bing Crosby va a recuperar a su amada, Linda Mason, (interpretada por Marjorie Reynolds) de las garras de ¿El malvado? Ted Hanover interpretado por Fred Astaire y de la supuesta fama instantánea que representa ser una novel estrella de Hollywood, por eso irrumpe en el Studio y luego de distraer a Hanover se mete en el Set de filmación en donde casualmente esta recreada su posada con todo lujo de detalles, el lugar donde por primera vez Jim y Linda entonaron su canción «white Christmast» y se conectaron románticamente. Justo Linda comienza a interpretar el tema nuevamente pero esta vez sin la compañía de Jim.
Entonces quiero detenerme acá y dejarles la intriga sobre que sucede después, para que vean el film de Mark Sandrick.
Lo que adoré de esta escena es la magia que se genera adentro del set, y como eso le da un marco mas espectacular al momento. Jamás pise un estudio de filmacion de las características y dimensiones como el que se muestra en esta escena y realmente espero que algún dia pueda hacerlo aunque lo unico que hoy se ve en un set son todas pantallas verdes y no una elaboracion como la de este film clásico.
Cuando la nieve comienza a caer de ese techo toda falsa, inverosimil y artificial, mi corazon no hace mas que añorar una filmación como esa, realmente los envidié a Astaire y Crosby por toda esa magia que sus ojos vieron.
Lo único que resultaba inverosimil en la escena es el desprecio que Jim Hardy muestra por todo ese despliegue cinematográfico, por toda la parafernalia, cuando el director le cuenta como la construyeron, pero no podemos criticarlo porque no todos quieren estar en un set y ciertamente iba en contra de su personaje y su desarrollo dejarse llevar por el artificio de Hollywood…cosa de escritores. Sin embargo adoro ver cuando una película se autoreferencia y se denuncia así misma como ilusiones a veinticuatro cuadros por segundo.